Para todos es conocida la famosa fábula de Esopo "La Tortuga y la Liebre", y todos hemos caído en la misma trampa. Ante nosotros un camino, al final un objetivo. Partimos confiados
en nuestros dones pero también cargamos con ciertas carencias que ocultamos y mezclamos con expectativas, aun así nos decimos: lucharé por alcanzarlo. Creimos en esa lucha contra
todo y arraigamos en nosotros fuertes sentimientos de pérdida, escasez, separación y peligro.
La tortuga y la liebre no son competidoraS
son
colaboradoras
En la ECONOMÍA DEL BIEN COMUN abrimos la puerta a otros paradigmas. La tortuga
y la liebre perdieron la oportunidad, enfrascadas en su lucha, de comprender que la vida real depende de otras personas y no sólo de uno mismo, también del aire que respiramos, del médico que nos visita, del agricultor que siembra para nosotros durante todo el año, del conductor de autobús que recoge cada día a nuestros niños para llevarlos al colegio...
Esta interdependencia es la verdad de la que nos escondemos en nuestros miedos. De ella podemos hacer nuestro verdadero objetivo, tomar como motivación la felicidad de las mismas personas que lo componen, lo comparten y lo construyen juntas, borrar la competencia y dejar paso a la colaboración. De esta manera, mi meta es el propio trayecto y mi seguridad la de aceptar mi responsabilidad y elegir continuamente la opción de no quedarme dormido ante el camino, como hizo la liebre, ni dejarme arrastrar por una hipotética buena o mala suerte.
La tortuga enfoca, la liebre apunta. La tortuga, debajo de su caparazón, es felina. Y la liebre descubre que quien tiene un don carga también una losa. Las dos ganan cuando la realidad
que dibujamos es para el bien común y es colectiva, donde los opuestos se concilian. Vivimos, existimos y cruzamos la línea del tiempo para experimentar que nuestros defectos y dificultades, en un futuro, son nuestras virtudes. El camino es sólo uno, aprender, superar los obstáculos que nos impiden encontrarnos en el corazón. Recordando estos principios, no son necesarias las luchas, defensa ni ataque, porque continuamente encontramos los atajos que nos unen. Cuando tu camino está delante tuyo todo se vuelve fácil y nos hacemos parte de un ecosistema integrado y colaborativo donde la vida simplemente florece.
PRINCIPIos
de la ebc
La
tortuga
y la
liebre
Va
lo
res
Este modelo económico se basa en valores que aseguran el éxito de nuestras relaciones: confianza, aprecio, cooperación,
solidaridad y voluntad de compartir.
Cambio de marco
lEgal
Se establece un nuevo marco legal que en lugar de favorecer la búsqueda de beneficio y la competencia incentiva la aportación al bien común y la cooperación.
Nueva definicion de
Exito
El éxito económico de las empresas pasa a medirse con el Balance del Bién Común en lugar de hacerlo con el balance financiero. Lo mismo ocurre a nivel macroeconómico.
Beneficios legales
Las empresas con un buen Balance del Bien Común consiguen ventajas legales como impuestos más bajos, reducción de aranceles, crédito más barato, prioridad en la contratación pública, etc.
Limi
tacio
nes
de poder
Las empresas que por su tamaño puedan tener un poder político excesivo pasarán a ser controladas parcial y gradualmente por los empleados y la comunidad en general (no los gobiernos).
Cola
bora
ciOn emprE
sarial
Como las empresas ya no quieren crecer más, la cooperación y solidaridad entre ellas se vuelve más fácil. La colaboración va en beneficio de la propia empresa (mejor Balance del Bien Común). El modelo se basa en la filosofía win-win.
El bene
ficio pasa de fin a medio
Se prohíbe el uso del excedente financiero para usos faltos de ética como inversiones en mercados financieros, adquisiciones hostiles, reparto a personas que no trabajan en la empresa o donaciones a partidos políticos.
Mayor iguaL
dad
Las desigualdades de ingresos y riqueza son limitadas mediante debate y por decisión democrática. Las herencias también son limitadas y su recaudación va a un fondo intergeneracional para que cada generación disponga del mismo capital inicial.
Banca dE
mO
crAtica
La banca sirve como todas las empresas al bien común y, al igual que los bienes comunales democráticos es controlada por el pueblo soberano, no por el Estado.
La natura
leza es
de TO
dos
La naturaleza tiene valor propio y no puede ser propiedad privada. Se evita el acaparamiento de tierras y su traspaso queda supeditado a requisitos ecológicos y sociales.
RE
dUc
ciOn de la joR
nAda lABo
ral
La jornada laboral se reducirá hasta el nivel deseado por la mayoría. Esto deja más tiempo para la vida personal y familiar y el trabajo comunitario o político.
Democra
cia par
tici
pativa
El pueblo soberano puede corregir a sus representantes, lanzar nuevas leyes, modificar la Constitución y controlar los sectores estratégicos.
Nue
vo sis
tema edu
cativo
La educación contendrá nuevos contenidos (educación emocional, ética, comunicacional, etc.) orientados a optimizar el bienestar de todas las personas.
Nuevo liderazgo
Ya no se buscan los directivos más despiadados, egoístas y "racionales" con los números sino personas competentes, con responsabilidad social y ecológica y empáticos.
Cooperaci
on econOmica muN
dial
Se establece una moneda global para el intercambio internacional y una zona de comercio justo entre los países EBC para favorecer a las empresas que más aporten al bien común.
Año sabAtico
Cada diez años trabajados se disfruta de un año sabático financiado por una renta básica temporal. Esto proporciona a la gente la posibilidad de cumplir sus sueños así como alivia el desempleo en un 10%.
Fin al crecimien
to obliga
do
Las empresas pueden buscar su tamaño óptimo y se liberan de la obligación general de crecimiento y de adquirirse una a otras.
CoM
mons
Las empresas públicas pasan a ser bienes comunales democráticos que garanticen servicios como la educación, la salud, los servicios sociales, la movilidad, la energía y la comunicación.
Reduc
ciOn de la huE
lla ecolO
gica
Se debe establecer una cota sostenible a nivel mundial para particulares, empresas y países. Algo imprescindible para respetar la dignidad de todo ser humano.
Modelo abierto
Todos los principios de la Economía del Bien Común debe ser sometidos a un intenso debate democrático antes de ser convertidos en ley.